Masificando el Sistema Intensivo del Cultivo de Arroz (SICA) para producir más con menos.
Como alternativa tecnológica para enfrentar la variabilidad climática, se desarrolló el Sistema Intensivo del Cultivo del Arroz (SICA) el cual, ha sido validado en Asia, África, algunos países de América Latina y en Panamá.
El contexto de la historia
El arroz es el alimento más consumido en Panamá, el cultivo más relevante en cuanto a superficie y la principal fuente de ingresos para más de 3.000 agricultores. Debido a su importancia, el arroz fue declarado como el primer cultivo de seguridad alimentaria en Panamá en 2018. Uno de los principales problemas que enfrenta el rubro es la baja productividad y los elevados costos de producción. A esta situación se suman los efectos del cambio climático, los cuales afectarán negativamente los rendimientos de arroz a nivel nacional. Aunado al número creciente de habitantes, la necesidad de lograr la seguridad alimentaria, la progresiva escasez de recursos hídricos y las ineficientes practicas del cultivo, requieren de una agricultura más sostenible.
El uso del Sistema Intensivo del Cultivo de Arroz (SICA) es una alternativa viable y efectiva para aumentar la productividad del arroz dentro de un contexto de agricultura familiar.
La iniciativa implementada
El proyecto busca aumentar la productividad del cultivo del arroz con el uso de la metodología del Sistema Intensivo del Cultivo de Arroz (SICA), mejorando las condiciones productivas, sustentabilidad y seguridad alimentaria. A manera de identificar los factores clave de adopción del sistema SICA en la realidad productiva de Panamá y establecer una la línea base. Implementar parcelas de experimentación para validar la metodología SICA y adaptarlo a las condiciones productivas y ambiental. Validar el aumento en productividad del sistema SICA con productores locales y transferirlo a otros productores, y compartir las experiencias para su escalamiento.
El SICA se presenta como una estrategia de mitigación y adaptación de la agricultura familiar, frente a los desafíos climáticos y económicos
Producto esperado
Los compromisos del proyecto para pasar de las prácticas de producción de arroz actuales a la adopción de la metodología del SICA se verificaron a partir de tres actividades que a continuación se detallan: Identificación de los factores clave de adopción del sistema y establecimiento de línea base de indicadores de impacto del proyecto. Implementación de las parcelas de experimentación para validar el Sistema Intensivo del Cultivo de Arroz (SICA) y Siembra Convencional (SC) durante dos ciclos de siembra 2021-2022 y 2022-2023 en seis localidades: Tonosí (Los Santos), Santa Fé (Veraguas); Olá (Coclé); Capira (Panamá Oeste); La Chorrera (Panamá Oeste) y Chepo (Panamá Este). Realizar jornadas de capacitación con extensionistas, productores locales, estudiantes y difusión de tecnologías a otros productores.
Menos costo, más producción y respeto a los ecosistemas.
Resultados
Los sistemas, SICA y SC, demostraron moderada resistencia a las principales enfermedades, con bajos niveles de incidencia y severidad. En cuanto a la variable de acame, el tratamiento SC mostró tallos débiles con tendencia al acame, mientras que el SICA presentó tallos fuertes sin tendencia al volcamiento. Los rendimientos del cultivo de arroz en los tratamientos SICA y SC fueron estadísticamente similares. Los rendimientos promedio del SICA fueron de 7,4 y 4,4 t ha-1 en los ciclos de siembra 1 y 2, respectivamente. En el sistema SC, los rendimientos promedio fueron de 6,3 y 3,6 t ha-1 en los mismos ciclos. Además, la parcela SICA utilizó menos semilla, dos cosechas al año, presentó menor costo en compra de insumos y mano de obra que la parcela SC. Se realizaron un total de 47 actividades de difusión de las tecnologías y gestión del conocimiento, en las que asistieron 779 personas entre productores, investigadores, extensionistas, estudiantes y profesores.